El shutdown del gobierno de EE. UU. se ha convertido en la principal fuente de incertidumbre en el mercado de divisas. Durante nueve días, las agencias federales han operado con capacidad limitada, y la publicación de datos macroeconómicos clave —incluido el informe de empleo— ha sido pospuesta. Esto priva al mercado de referencias, aumenta la volatilidad y eleva la demanda del dólar estadounidense como activo refugio.
Para el par EURUSD, el factor clave es la combinación de la presión política en EE. UU. y la debilidad del euro en medio de la incertidumbre en la eurozona. El par permanece en rango y reacciona principalmente a las noticias procedentes de Washington.
Este análisis examina cómo el shutdown y las expectativas sobre las decisiones de la Fed podrían influir en el rendimiento del EURUSD entre el 13 y el 17 de octubre.
El par EURUSD registró pérdidas significativas la semana pasada. El potencial de crecimiento sigue limitado por la fortaleza del dólar estadounidense y la persistente incertidumbre en la política fiscal de EE. UU.
El shutdown del gobierno estadounidense se ha extendido a una segunda semana. Ha detenido la publicación de estadísticas macroeconómicas clave —incluido el informe de empleo— y ha incrementado la incertidumbre del mercado. La probabilidad de un recorte de tasas por parte de la Fed en la reunión del 29 de octubre se sitúa en 95 %, con el mercado parcialmente descontando otro recorte en diciembre.
El euro recibe cierto apoyo de los datos moderadamente positivos de la eurozona: la inflación se desaceleró a 2.6 % interanual, y la actividad empresarial en el sector servicios aumentó, compensando la debilidad del sector manufacturero. Sin embargo, la inestabilidad política en Francia y las expectativas de un estímulo fiscal más agresivo en Japón han reforzado la posición del dólar como activo refugio.
En el gráfico diario, el par EURUSD se consolida cerca de 1.1537 tras una caída de cuatro días desde 1.1743. La dinámica actual muestra un intento de estabilización a corto plazo tras una fuerte caída, aunque la perspectiva técnica general sigue siendo bajista.
El nivel de soporte clave se ubica en 1.1388, donde podría producirse el primer retroceso significativo por parte de los compradores. La resistencia más cercana está en 1.1917; un regreso por encima de este nivel confirmaría un giro alcista a medio plazo.
El Estocástico se encuentra cerca de la zona de sobreventa y próximo a cero, lo que sugiere la posibilidad de un rebote a corto plazo, aunque esto no se confirma por los volúmenes. El MACD también se mantiene alrededor de la línea cero, señalando un impulso débil. Los volúmenes continúan disminuyendo, lo que confirma la falta de confianza entre los participantes del mercado.
El precio se acerca a la banda inferior de Bollinger, lo que podría provocar un rebote técnico. En general, el par sigue bajo presión. Sin una confirmación de movimiento por encima de 1.1600, persiste el riesgo de una caída continua hacia 1.1388.
El par EURUSD se consolida cerca de 1.1537 tras una caída de cuatro días desde 1.1743. El par sigue bajo presión por la fortaleza del dólar y la incertidumbre política en EE. UU. El MACD se mantiene cerca de cero, el Estocástico en zona de sobreventa, y el precio cerca de la banda inferior de Bollinger, todo lo cual apunta a un posible rebote a corto plazo.
El shutdown en EE. UU. añade incertidumbre, pero mantiene la demanda de dólares como activo refugio. La inestabilidad política en Francia también limita el potencial del euro.
Las posiciones largas son posibles si el precio se mantiene por encima de 1.1600. Los objetivos son 1.1740 y 1.1830.
Stop-loss por debajo de 1.1500.
Las posiciones cortas son relevantes si el precio rompe por debajo de 1.1500. Los objetivos son 1.1440 y 1.1388.
Stop-loss por encima de 1.1600.
Conclusión: el escenario base sugiere consolidación dentro del rango 1.1500–1.1740, con un sesgo bajista hasta que la Reserva Federal confirme la flexibilización de su política.
El sentimiento del mercado sobre el EURUSD se mantiene moderado. La principal fuente de incertidumbre es el shutdown del gobierno de EE. UU.. No se ha alcanzado ningún compromiso en el Congreso, y las publicaciones de datos macroeconómicos clave siguen suspendidas. Esto impulsa la demanda del dólar como activo refugio y limita el potencial de recuperación del euro.
Técnicamente, el par se consolida en torno a 1.1530–1.1560, manteniendo margen para un movimiento alcista hacia 1.1740–1.1830, y posiblemente hacia 1.1915 en caso de una ruptura al alza. Sin embargo, las condiciones fundamentales siguen siendo restrictivas. El escenario base para el 13–17 de octubre sugiere que el par probablemente se mantendrá por encima de 1.1500, operando dentro del rango con un sesgo moderadamente alcista.
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